La experiencia del duelo durante la pérdida de peso
30 noviembre, 2022 por
L.P. Eduardo Hernández
A lo largo de las diferentes etapas de la vida nos enfrentamos a una gran cantidad de pérdidas, no obstante, asociamos este tema principalmente con la muerte. Ya sea de conocidos, amigos o familiares, olvidándonos de la cantidad inmensurable de experiencias a las que hace referencia dicho concepto. En este sentido, las pérdidas están presentes en diferentes situaciones del día a día, muchas veces de manera tangible y siempre acompañadas por la subjetividad. Por mencionar algunas: las rupturas de los vínculos, en las separaciones de pareja, en el término de una relación laboral, en un periodo de crecimiento físico como cuando se deja de ser niño para convertirse en adolescente, en el fracaso de una inversión económica y por supuesto, en los cambios que se dan en el entorno y/o en uno mismo.

Es así como una pérdida puede tener diversos caminos, algunos más convenientes y otros no tanto; algunos que permiten el desarrollo emocional y otros que estancan e inmovilizan; algunos que permiten crecer y otros que no permiten vivir, que enferman y detienen y otros, que empujan y construyen. En ellos pese al dolor y la nostalgia se da un espacio a la ausencia, que implicará reconocerla y asumirla en uno mismo, ¿qué se ha perdido con aquello que falta? para más tarde, poder aceptarla y no desmentirla, duelar y no negar.

Por lo tanto, el duelo implica un trabajo emocional que requiere mucho esfuerzo e inversión de energía, involucra un intenso proceso de elaboración en el que resulta imprescindible el recuerdo acompañado del afecto y un fuerte compromiso mental que apunte a tolerar el malestar, retirar la energía depositada en lo perdido y de las representaciones vinculadas a eso que se perdió, renunciar a la posibilidad de retenerlo o recuperarlo y por supuesto, el establecimiento de un nuevo vinculo al que se dirigirá la energía, el interés y el anhelo.

Es así como me surgen varias preguntas que más allá de buscarles una respuesta, intentaré poner sobre la mesa interrogantes que permitan problematizar el por qué del sobrepeso o la obesidad que atañe a cada uno de los pacientes que consultan y, por supuesto, a cada uno de los especialistas que acompañan. ¿A qué nos referimos con perder peso? ¿Será únicamente al peso en kilogramos o a ese peso que nos inmoviliza y desmoraliza? o ¿qué es lo que se está perdiendo cuando físicamente hay un progreso? ¿serán únicamente los kilogramos de grasa que tenemos encima o será la pesadez que invade, deprime y desvaloriza? ¿Qué es lo que no se podrá perder cuando no hay una buena evolución? ¿Qué es eso que se pretender acumular, retener o almacenar?

En este sentido, el proceso de pérdida de peso, desde mi punto de vista, implica atravesar una serie de duelos. Desde los que no se han vivido, que son alojados y colocados en el cuerpo, y desbordados y sintomatizados en el peso, que remiten a los abandonos, al descuido y a los malos tratos, hasta los que implican un nuevo movimiento que surge del hacer algo por uno mismo, que remite a transgredir lo impuesto, resignificar lo vivido y crear algo con nuestro cuerpo, imagen, deseo e identidad.


eSPECIALISTA

Eduardo Hernández

Psicólogo

Psicólogo clínico y psicoterapeuta psicoanalítico. Considera que una parte fundamental de la calidad de vida es la atención de la salud mental y el bienestar emocional. Con su escucha y labor acompaña a sus pacientes en la comprensión de su mundo interno y emocional, en la búsqueda del origen de los conflictos que les que causan malestar y sufrimiento y en el entendimiento de la manera en el que se desarrollan en la vida frente a las problemáticas cotidianas.

L.P. Eduardo Hernández 30 noviembre, 2022
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