Resulta común que en los pacientes que se acercan a un tratamiento de pérdida de peso, su única consideración en mente sea la pérdida de peso. Sin embargo, hay muchos factores a considerar al iniciar un tratamiento de este tipo.

Las dietas solo las prescribe un especialista de la salud

Cuando se explora los antecedentes de un paciente en torno a dietas o planes de alimentación, es muy común escuchar que lo intentaron llevar por su cuenta, haciendo cambios drásticos en su alimentación de forma incorrecta. Estos cambios generalmente fueron llevados por medio de la información que encuentran en redes o internet y no de la mano de un especialista. 

Las dietas siempre se tienen que realizar de la mano de un profesional de la salud, ya que las restricciones alimenticias son un cambio drástico. Se requiere de un cálculo personalizado ya que hay que considerar muchos factores a nivel clínico para el diseño de un plan de alimentación. 

Actualmente, la facilidad de acceso a la “información” (o la desinformación) respecto a esto puede parecer que emplear las “dietas de moda” sea algo fácil de llevar o ejecutar, pero la realidad es que se debe tener mucho cuidado al realizar una dieta sin conocer en qué condiciones está tu cuerpo y cuáles son sus necesidades. Podría resultar en la generación de más riesgos que beneficios, a pesar de lograr una pérdida de peso.

El plan de alimentación se prescribe según a las necesidades clínicas y objetivos del paciente, no a la dieta que está de moda 

Los pacientes se acercan teniendo en mente como podría ser su plan de alimentación y en ocasiones la expectativa no coincide con lo que clínicamente requieren. Pueden tener deseos de hacer alguna “dieta de moda”, pero si esta no cubre con lo requerimientos que necesitan, entonces no se beneficia o cubre los objetivos a mejorar de acuerdo con sus estudios de laboratorio. O bien, no es la más adecuada de acuerdo al estado de salud actual. Lo ideal será confiar que la dieta que te prescriba tu especialista será acorde a tu estado de salud, objetivos y necesidades. 

En caso de no llevar un correcto control en la dieta, podría resultar en una pérdida de peso, pero a expensas de masa muscular, condición que podría traducirse en “rebote” de peso con el paso del tiempo.

Buscar resultados inmediatos y no a largo plazo

Cuando se inicia un tratamiento de pérdida de peso se hace una proyección de este y el objetivo es llegar a una composición corporal idónea, para esto se diseña un plan de alimentación para lograr esta meta. Pero después, ¿qué pasa si se retoman los malos hábitos? Es una realidad: al llegar a un peso ideal tendrán que sostenerse a lo largo del tiempo hábitos de salud favorables, como el beber agua, cuidar los horarios de comida, realizar ejercicio de forma constante, cuidar porciones de alimentos, etc. 

El regresar a los viejos hábitos solo ocasionara regresar al peso que ese estilo de vida ocasiono. Los cambios no son temporales, se busca sostenerlos aun después de lograr el objetivo inicial. 

Comer mejor y hacer ejercicio será lo único que me ayudará a perder peso

El sobrepeso u obesidad podría originarse por factores alimenticios, psicológicos o incluso fisiológicos. Las causas son multifactoriales. Identificar el origen es primordial para tener resultados saludables y sostenibles a largo plazo

El abordar el sobrepeso u obesidad de forma interdisciplinaria ayuda a tener un panorama más amplio de la causa que originaron los problemas de salud, si el entorno es un determinante para esto, si algo más allá de la fuerza de voluntad o el apego del paciente, está siendo un factor determinante para la perdida de peso. 

Déjate guiar y apóyate de tus especialistas 

para lograr tus objetivos.